EL OJO POR OJO:
Mas si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida,
ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie,
quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.
Éxodo 21:23-25
Uno de los principios de Dios es la justicia justa para castigar a los malhechores de acuerdo con las leyes de Dios entregadas en el Sinai. Se explica de una manera muy elemental ¡El ojo por ojo! entendible para todos así de fácil. Deuteronomio 19:21. Pero como todo lo que depende de los seres humanos es manipulable en vez de ser leyes de justicia se transforma en una venganza, por la perversión de las leyes.
Jesús lo explica de forma magistral cuando expone la mal aplicación que
los fariseos hacían de este principio de ley justa, en Mateo 5:38. Era indudable que la ley preveía un castigo de acuerdo con la clase del delito para que fuera justo, tal principio fue pervertido por los fariseos, de ahí los reproches de Jesús.
Sin embargo todo el que se arrepiente de sus faltas y errores Dios lo perdona pues todas las faltas y errores de los hombres contra otro hombre son faltas contra Dios. El principio que Jesús enseño es, perdón y tolerancia, Ya que el sacrificio de Jesús nos libera de las consecuencias de nuestros errores. (Mateo, 5:38-42) Dios juzga con amor, ¡Porque Dios es amor!