EL CORAZÓN
EL corazón
Los sentimientos anidan en el corazón, como por ejemplo la compasión nadie puede ser bueno si no es compasivo la bondad y la misericordia, sentimientos que transmitimos a los demás porque nos preocupamos por ellos,. son sentimientos de amor por los demás es demostrar nuestro interés por ellos. El alimento del corazón es el amor, sin amor la vida carece de significado, es la fuerza que nos mueve la vida. Es la vitalidad que necesitamos para vivir y compartir con los demás esta ilusión que mueve nuestro interior, y muy especialmente el corazón. Es la pasión por una cosa, un deseo por algo. Tal vez sea un amanecer hacia un nuevo día es la luz que simboliza lo bueno que hay en nosotros, y encontrar el equilibrio entre la tristeza y la alegría. Un deseo vehemente por agradar a los demás y al mismo tiempo encontrarnos con nuestra propia humanidad. No sera fácil encontrarnos en el ambiente adecuado para nuestro desarrollo interior y crecer como ser humano.
Nos movemos en un ambiente hostil que no favorece los valores naturales de la persona, y influye en el
comportamiento cultural y psicológico del hombre. En esta sociedad tan competitiva en la que vivimos no nos queda tiempo para reflexionar en las cosas que nos estamos perdiendo, por el ritmo de vida que llevamos, y es de lo mas precioso que tenemos, como son nuestras emociones. Es el sentir lo que sucede en nuestro corazón y mente, que tal vez nunca nos hemos escuchado y descubramos como realmente somos. Descubriendo nuestras emociones escondidas en lo mas profundo del corazón Es el tiempo de la inmortalidad de los sentimientos mas puros que nunca desaparecen, algo exquisito que llevamos en el interior compuesto de emociones sentimientos y recuerdos, que deseamos transmitirlos a los demás, no sera tarea fácil ,pues existen multitud de obstáculos que dificultan nuestras relaciones con los demás.
Obstáculos culturales sociales ambientales y tal vez por nuestro propio carácter. Vivimos en una sociedad industrial y mercantil y este es el medio en el que subsistimos, y como es normal estamos tan preocupados por el éxito que hemos perdido nuestra identidad interior y necesitamos encontrarnos a nosotros mismos. No nos queda tiempo para la meditación o la reflexión. Cuando observamos algunas culturas orientales y nos fijamos en su conducta, notamos que viven despreocupados por el mañana, pues viven y subsisten en un medio de paz y hermandad entre sus vecinos.
¿Son mas felices que las sociedades industriales? Simplemente sus prioridades son otras, están mas pendientes de su desarrollo emocional. Tienen una vida psicologicamente mas equilibrada y esto beneficia a la salud mental del individuo. Menos depresiones y suicidios y un desarrollo positivo de la personalidad.
Ahora bien no existen sociedades perfectas, los conflictos y los problemas existen en cualquier lugar, simplemente nos tendremos que adaptar al medio en el cual vivimos, y encontrar nuestro punto de equilibrio interior. En la cultura en la que vivimos encontramos el amparo y la seguridad, y nos beneficiamos de ello, pero eso no sera un impedimento para nuestro desarrollo emocional o psicológico como persona. Nadie tiene el derecho de apropiarse de nuestras emociones y sentimientos que nos van a condicionar nuestra personalidad. Somos un frasco delicado y nos afecta lo que pasa a nuestro alrededor, nos sentimos ofendidos a veces por la conducta de alguien, pero no vivimos en una burbuja encerrados en nosotros mismos.
Vivimos en sociedad y esos son los riesgos, como también los beneficios que son inmensos. Compartimos alegrías y sentimientos con las personas de nuestro alrededor que condicionan nuestro carácter y personalidad mas humana. Lo mejor sera ordenar nuestros sentimientos la anarquía en nuestra vida
personal no sera positiva, hay que encontrar el equilibrio para la vida social y personal, analizando nuestra propia estructura emocional, la compasión la bondad el altruismo la lealtad, son valores a tener en cuenta si deseamos un desarrollo equilibrado como personas.
Las personas que son dulces, tienen una personalidad muy atractiva de igual manera que las cariñosas, son como mensajeros de buena esperanza, desempeñan una acción positiva a su alrededor El dolor emocional y la angustia nos impiden conocernos a nosotros mismos, por tanto a amarnos y a querernos. No tengamos el vicio de no saber amar a los demás hay una exigencia formal a toda persona y es, el de saber amar. La victoria sera nuestra por vencer los obstáculos encontrados, somos mas que vencedores, personas emocionalmente equilibradas, en defensa de nuestros sentimientos. Es la fuerza del derecho a ser uno mismo, sin modificar lo que sentimos por los que nos rodean.
ENRIC